chapar con mi generación 


Las imágenes fueron realizadas en fiestas entre el 2018 y principios del 2020 a personas de mi círculo cercano con una cámara Canon PowerShot. El dispositivo, que es chiquito y tiene un flash incorporado, me permitió acercarme y registrar aquello que deseo coleccionar. Besos en fiestas, charlas en el baño, esquinas a donde no llega la luz principal, las escaleras que te llevan a la terraza, y todos esos lugares íntimos dentro de la multitud.

Por ejemplo, una especie de ritual que se repetía entre fiesta y fiesta y que se ve en las fotos: Antes de ir a una fiesta llevábamos mochilas llenas de ropa a la casa de una de nosotras, nos vestíamos y nos maquillábamos colectivamente, nos prestábamos todo, por eso es que se repite la ropa pero en personajes distintos. Íbamos a fiestas como La hiedrah, pista lolleata, o alguna organizada por nosotrxs mismxs o nuestrxs amigxs en sótanos o casas de algún padre separado que dormía en otra parte. Volvíamos de día con olor a cigarrillo en el pelo enredado, para dormir un rato con las persianas bajas para que no moleste el sol. Al otro día me encargaba de bajar las fotos a la compu y pasarselas a mis amigas para rearmar la noche.

En momentos de muchas dudas e incertidumbre nuestro lugar seguro son las fiestas en donde nadie nos juzga ni exige, en donde bailamos y nos besamos con amor, deseo y ternura.













El trabajo fue publicado en 2020 en Revista Crisis, ensayo visual de la revista número 41, editado por Jazmin Tesone y acompañado por un poema de Helena Wiznia.
Una de las fotografías de este trabajo fue elegida para el Homenaje a Nan Goldin del festival NANO Fotografía expuesta en el CCK en 2018